Saber escuchar – Todo habla: Uno es Todo  y Todo es Uno.

Saber escuchar – Todo habla: Uno es Todo  y Todo es Uno.

Todo habla: Uno es Todo  y Todo es Uno.

Desde el origen de los tiempos, la humanidad ha logrado sobrevivir gracias a nuestra Madre Tierra, que sin egoísmo alguno, nos ha regalado en su abrazo maternal con el agua, el aire y el fuego lo necesario para vivir.

¿Escuchamos la voz de nuestra Madre Tierra? ¿Sabemos que somos parte de ella, como un todo de la Creación?

Ella, nos habla cuando se agrieta y con una mueca de dolor nos dice: “basta ya de desolarme con la corta de árboles y la contaminación de mi suelo.” Con el viento nos susurra al oído que dejemos crecer a sus plantas, para no entorpecer la fotosíntesis y permitir la captación de la energía solar.

También nos habla la Montaña, cuando su nieve fundida y su lluvia bajan por sus laderas para venir a fertilizarlo todo.

Nos habla el Viento desde las suaves brisas del alba, desde los torbellinos que soplan de la colina, cuando arrastra y lanza el polvo de los desiertos, para pedirnos que volvamos a plantar árboles como  aquellos  que la naturaleza, sin la mano del hombre, nos había regalado.

Nos hablan los ríos cuando arrastran lo inútil que les hemos lanzado, para inundar y destruir lo que hemos construido al lado de ellos. ¿Por qué? porque estorban su paso hacia los lagos y mares y no les queda otra forma, que no sea ensancharse y levantarse, derramándose  sobre la superficie.

Si la razón según San Agustín es la energía del Universo, ¿entonces por qué no razonar para entender el principio de las cosas?

Si tan sólo pusiéramos atención a nuestro entorno, nos daríamos cuenta que todo nos habla. Si observamos que nos depara lo que encontramos en nuestro camino, recibiríamos del mundo que nos rodea, las indicaciones para proceder con justeza, para corregir y ser cada día más idóneos con nuestra naturaleza.

¿Hemos acaso reconocido los regalos que hoy hemos recibido? tales como rocío de la mañana, el sol que nos da su energía, los pájaros y su canto, las flores y su perfume, las estrellas al anochecer… ¿Qué nos dicen del Todo?. Nos dicen que  callemos el loco discurso de nuestra mente, para  así lograr escuchar la voz de nuestra consciencia, que nos diría que tenemos dentro las semillas que, regadas por el amor, germinarían para hacer nacer y crecer nuestro ser, que es el Uno que pertenece al Todo. Si tan sólo observáramos las flores, hallaríamos en ellas la respuesta a la belleza, la alegría, la fecundidad, y la resurrección.

Autor: Rafael Manzanares  Benavides